lunes, 28 de marzo de 2011

Cuanto menos te entiendo, más me gusta.

Sentirse algo odiado por algunas personas de tu alrededor reconforta cuando hace que tú te sientas bien contigo mismo. Exageremos el término "Odio" para referirnos al estado de saber que hay quien no valora lo que haces, no le gusta, no lo ve como tú y se limita a decírtelo claramente, a tirarte indirectas sangrantes o a ignorarte directamente.


Digamos que en ese estado de ignorancia me encuentro yo ahora mismo: la que yo provoco para protegerme de las cosas que no me gustan: y es que empieza a darme igual que no me llames, que no me hables, que no tengas tiempo para mí o llanamente no me saludes. Hoy sé que yo estoy ahí para cuando quieras ser como eras siempre, hablarme, pedirme ayuda, ejercer de familiar... lo que quieras. No sé bien qué te corresponde.


Creo que me hace bien sentir que no soy como tú. Quizás por eso no merezcas ni una sola lágrima.







Qué bien vienen los paseos...

jueves, 24 de marzo de 2011

¿Podremos tener algún día tranquilo?

Los humanos tenemos una tendencia innata de complicarnos la vida. En lugar de pensar en lo que tenemos que hacer ahora, hoy, en este momento, vamos siempre más allá, buscando adivinar el futuro, respondiendo con respuestas inquisitivas aquello que nos preguntamos a nosotros mismos día tras día, creando situaciones ficticias y anteponiendo sentimientos y sensaciones que aún están por llegar.

Así, nos hacemos daño de antemano. Creemos saberlo todo y empleamos nuestra inteligencia, o lo que quede de ella en reafirmarnos en posturas estúpidas.


Gracias por venir una vez más en el momento justo para enseñarme que las cosas no tienen tanta importancia. Gracias porque de una forma u otra sé que estás ahí, que siempre nos tendremos.


Y gracias también a los que sólo tengo a ratos, consiguen que me sienta más vinculada a mi misma...




Deseando terminar mi racha de mala suerte.
¿Qué romperé hoy?



[Otro jueves 24, como los de febrero :) ]

lunes, 21 de marzo de 2011

It's coming home, it's coming home, it's coming...football...

En la vida, como en el fútbol, nos esforzamos rápidamente por aquello que nos importa, empleamos nuestra energía y corremos porque el tiempo nos pisa los talones… cuando llegamos al área pequeña del asunto, las opciones se bifurcan: podemos meter el gol, celebrarlo y ganar la victoria; pero también puede el adversario quitarnos la posesión de aquello que queremos y realizar un contraataque que nos deje desprevenidos y nos haga correr cuesta abajo, sin más intención ni más miramiento que recuperar aquello que era nuestro.
En la vida, como en el fútbol, no sirve de nada meter unos cuantos goles si no ganas el partido, porque la prensa es exigente y no valorará tu esfuerzo, sino que criticará lo que te faltó por hacer.
No valen las patadas, los empujones ni las zancadillas. Hay faltas involuntarias, tantas como errores grandes que conllevan tarjetas rojas. También hay público, que aunque más reducido, te sigue con pasión, te vigila con cariño, llora contigo y te regaña cuando eres vago, no te mueves, te quejas sin motivo o te tiras al suelo para llamar la atención.
En la vida, como en el fútbol, podemos repartir la carga con nuestros compañeros de fatiga, ayudarlos a levantarse del suelo o simplemente darles un buen pase, ese que necesitan para triunfar. Hay saques de puerta, que son segundas oportunidades, para hacer las cosas bien esta vez; hay corner, situación extrema que nos hace reaccionar en un instante para impedir perder.
En la vida, como en el fútbol, siempre quedará pensar qué habría pasado si hubiéramos chutado a puerta, cómo habríamos celebrado el gol de haber ganado, o cómo nos iría si hubiéramos aceptado la oferta de otro equipo.
¿Sabes que es lo mejor del fútbol? Que cada semana es una nueva oportunidad para intentar ganar.

jueves, 17 de marzo de 2011

Ya me despido del abrigo =)

Despunta la primavera...


por fin he encontrado sol y cielo azul al subir la persiana esta mañana. Es una forma totalmente diferente de comenzar el día; el Sol me ayuda a estar de buen humor, le aporta a mi día una chispa que no encuentro con las nubes grises de los últimos días.

La primavera trae tiempos de estudios: vendrá la cara oculta de los buenos días y las tardes de paseo con niños correteando cuando me encuentre delante de un montón de folios, subrayadores y cafeína.

Pero es Primavera. Y en primavera la gente sonríe aunque tenga los ojos rojos y estornude, porque pasear es más barato y porque el aire va cargado de buenas vibraciones.


A ver si nos enamoramos un poco de las cosas pequeñas aprovechando todos estos días
:)




...que difícil escribir a gusto de todos.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Manifiesto contra caparazones.

Siento la necesidad de rebelarme contra todo eso que te cubre, lo que hace que no te pueda disfrutar un poco más, que no pueda sentirte cercano, que en cierta medida te pierda...

Cansada de retener un abrazo, una mirada o al menos un par de besos. Mintiendo si dijera que no pienso en ti cuando me voy a la cama, que no miro tu foto... pero frustrada al despertar, cuando no nos encuentro, no te veo y volvemos a entrar en el juego del disimular...

Como me gustaría contarte todo lo que te he echado de menos... o aun mejor, como me gustaría ponerme a tu altura, desaparecer y que las cosas dejaran de importarme.
Como me gustaría que fueras el "Tú" que yo conocí.




Como me gustaría que no me gustaras.

Va por ti, sol.





[ En camino mi 5º resobrin@ ... tal y como soñé, ¿Coincidencia?]

viernes, 11 de marzo de 2011

Dime lo que soy para ti.

Ven. Siéntate a mi lado y cuéntame qué somos. Dime si ahora eres mi amigo. Dime por qué te acuerdas de mí, cómo me sientes. Cuéntame qué pasa por tu mente al llegar a mi portal, si me sientes respirar.

¿Quieres coger mi mano?

Yo que tanto decía, yo que tanto me quejaba…y ahora que te tengo no sé si malinterpreto. Porque yo conozco esos ojos y esas miradas, yo ahora no sé bien quién eres, ni a qué juegas; pero cógeme, ven. Sabes que estoy aquí, ¿Lo sabes verdad?

¿Me quieres? Yo a ti sabes que no puedo… pero te recuerdo cada día al despertar. Casi podría decir con total seguridad que no he dejado de pensar en ti.

No… yo no te quiero, te extraño. Necesito tus abrazos, añoro tus besos. Quiero pasear y hablar de nada. No te vayas. No te pongas la máscara. Te conozco. Sé en el punto que estamos. A veces creo saber que no vendrás, pero siempre estás ahí.

No me pidas que deje de perder el tiempo, si tú no quieres que te olvide.

jueves, 10 de marzo de 2011

"Te Odio y Te Quiero...soy tan cobarde"

Mi risa es tan tremendamente escandalosa como fácil de provocar, pero también mi semblante es serio cuando nada perturba mi tranquilidad. Esa facción siempre ha provocado el recelo de los de alrededor, que no saben en qué momento acercarse a mí.

Los últimos días no han sido alegres, ni siquiera intermedios: por momentos me ha invadido la tristeza; pero la de verdad, la profunda. Nada de rabietas, ni siquiera de lágrimas... sólo esa sensación de vacío, de incomprensión y de impotencia ante las cosas que se pierden sin remedio.

Y hoy he vuelto a reír porque me he tumbado por encima de mis pensamientos, me he tapado con una sábana tejida de amor propio, hilos finitos de orgullo y algodón del pasotismo... pero de los buenos, de los que como siempre digo, hacen falta de vez en cuando. Porque con tus tonterías has conseguido que yo me sienta bien conmigo, porque yo sigo ocupando el mismo lugar en tu vida pase lo que pase y eso de alguna forma me enorgullece. Porque hablar con una amiga y ver las mil cosas que aun nos quedan por vivir juntas siempre es un incentivo para seguir. Porque cuatro bromas y una buena cena valen más que tejer hipótesis sobre tus pensamientos.


Hoy he vuelto a reír porque al fin y al cabo está en nuestra mano qué hacer con los recuerdos. Como una pila que se gasta, podemos tirarlos a la basura... pero a la larga contaminarán... podemos simplemente guardarla en un cajón hasta que haciendo limpieza la volvamos a encontrar...
como no todas las pilas son recargables, me quedo con la opción del reciclaje.

Utilizaré mis recuerdos para sonreír cada noche por todo aquello que pasó
y no, no volveré a entristecerme,
¡Compraré pilas nuevas!

martes, 8 de marzo de 2011

Vuelvo al futuro imperfecto . . .

Y la vida siguió, como siguen las cosas que no tienen mucho sentido.

Aprendiendo en un día como hoy, que la frase "Quien bien te quiere, te hará llorar" sólo esconde una cobardía que intento que no vaya conmigo. Aprendiendo que quien no tiene valor para las cosas importantes no merece atención; que quien da portazo siempre vuelve, pero ya no debería estar ahí.


Aprende María aprende...

Aprende que de las experiencias se aprende y que no haces más que tropezar; pero ten en cuenta también, que quien tropieza y no se cae... dos pasos adelanta ;)







"Ella soñará un verso que él nunca escuchará,él no trepará sus trenzas una noche de invierno. Ella soñará un viaje y no habrá despedidas, ni canciones de amor, ni Capuleto y Montesco..."

lunes, 7 de marzo de 2011

"No puedes avanzar desde el lugar en el que te encuentras…"

Me ha resultado muy paradójico que mi “Spotify” me dijera esa frase cuando casualmente mi cursor se ha posado encima de la flecha de avance…
Me ha inundado una carcajada silenciosa por la casualidad del momento, después me he quedado quieta pensando que hasta los programas de mi ordenador me recuerdan que tengo que espabilar…
De modo que me he sentado en medio del camino para ver todo lo que me impide avanzar, para dar un último mensaje, de despedida. Hoy vengo a decir “adiós” a todo aquello que no me deja ver el otro lado.
Dejo un cuento de Bucay que resume muy bien todas estas sensaciones.




Voy andando por un sendero.
Dejo que mis pies me lleven.
Mis ojos se posan en los árboles, en los pájaros, en las piedras. En el horizonte se recorte la silueta de una ciudad. Agudizo la mirada para distinguirla bien. Siento que la ciudad me atrae.
Sin saber cómo, me doy cuenta de que en esta ciudad puedo encontrar todo lo que deseo. Todas mis metas, mis objetivos y mis logros. Mis ambiciones y mis sueños están en esta ciudad. Lo que quiero conseguir, lo que necesito, lo que más me gustaría ser, aquello a lo cual aspiro, o que intento, por lo que trabajo, lo que siempre ambicioné, aquello que sería el mayor de mis éxitos.
Me imagino que todo eso está en esa ciudad. Sin dudar, empiezo a caminar hacia ella. A poco de andar, el sendero se hace cuesta arriba. Me canso un poco, pero no me importa.
Sigo. Diviso una sombra negra, más adelante, en el camino. Al acercarme, veo que una enorme zanja me impide mi paso. Temo… dudo.
Me enoja que mi meta no pueda conseguirse fácilmente. De todas maneras decido saltar la zanja. Retrocedo, tomo impulso y salto… Consigo pasarla. Me repongo y sigo caminando.

Unos metros más adelante, aparece otra zanja. Vuelvo a tomar carrera y también la salto. Corro hacia la ciudad: el camino parece despejado. Me sorprende un abismo que detiene mi camino. Me detengo. Imposible saltarlo
Veo que a un costado hay maderas, clavos y herramientas. Me doy cuenta de que está allí para construir un puente. Nunca he sido hábil con mis manos… Pienso en renunciar.
Miro la meta que deseo… y resisto. Empiezo a construir el puente. Pasan horas, o días, o meses. El puente está hecho. Emocionado, lo cruzo. Y al llegar al otro lado… descubro el muro. Un gigantesco muro frío y húmedo rodea la ciudad de mis sueños…
Me siento abatido… Busco la manera de esquivarlo. No hay caso. Debo escalarlo. La ciudad está tan cerca… No dejaré que el muro impida mi paso.
Me propongo trepar. Descanso unos minutos y tomo aire… De pronto veo, a un costado del camino un niño que me mira como si me conociera. Me sonríe con complicidad.
Me recuerda a mí mismo… cuando era niño.
Quizás por eso, me animo a expresar en voz alta mi queja: -¿Por qué tantos obstáculos entre mi objetivo y yo?
El niño se encoge de hombros y me contesta: -¿Por qué me lo preguntas a mí?
Los obstáculos no estaban antes de que tú llegaras… Los obstáculos los trajiste tú.

jueves, 3 de marzo de 2011

Una vez más, seré lo que tú quieras.

Sé que tienes el control; que contra ti no se puede luchar, que llevas tu propio ritmo sin pararte a pensar en los demás; que eres egoísta y que según tus preferencias caes mejor o peor entre las personas... Sé que estás presente en la mente de todos y arrasas por la vida...

Pero por favor Tiempo ...
dame una gran memoria que abarque todos esos recuerdos que no quiero olvidar...
para dejar así que se me vuelva a poner la piel de gallina al recordar el roce de su pelo, los abrazos y los besos.

Confío en ti Tiempo: creo que puedes seguir regalando ratos inolvidables;
sé que el pasado ya no es nuestro, pero no te perdono que me quites lo que sé que ya he vivido, lo que al fin y al cabo crea una esperanza para lo que venga mañana.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Soy pájaro en mano. Tú, ciento volando . . .

Mientras despega un avión alguien bosteza en clase; seguramente para alguien sea un gran día; seguro que hay una niña naciendo, alguien está recibiendo una mala noticia y alguna pareja hace el amor.

Pasan los días y sigo esperando para verte
:)



¡Bienvenida al mundo Patricia!

martes, 1 de marzo de 2011

Ronco Invierno



Y así, como por lo atractivo del canto de una sirena, se levantó de su silla y se dirigió a la ventana. Sabía que hacía frío y que ya no había luz: pero no le importaba.
Necesitaba respirar el último aliento del último capítulo de la Historia Interminable; necesitaba que el aire se llevara sus palabras, sus miedos.
Entró al salón y dio portazo con la puerta del balcón; su cara era de enfado, pero su corazón no podía sentir rabia.


Con las mismas ganas de dar un abrazo y la inconformidad de las cosas que no salen bien, volvió a sentarse en su silla.